Un caso insolito.

+Doctor, no se que me pasa... siento escalofrios, pinchazos en el pecho, ganas de sonreir, y de vez en cuando, se me revuelve el estomago de forma agradable... tengo ganas de cantar, ganas de bailar, ganas de hacer cosas buenas! Doctor, es muy grave? -Y esto cada cuanto le pasa? + Bien, mire doctor.. es raro.. pero me pasa cada vez que le miro a los ojos. - a mi? + no... a el! - ahhhh, ya entiendo... lo suyo es facil, es un caso tratable, pero cuando le diga de que se trata no querra curarse, es algo insolito en usted al parecer, ¿nunca lo habia experimentado?, bien, bien... se trata de un sencillo caso de enamoramiento. + Imposible! doctor, usted me dijo que yo tenia el corazon roto, hecho añicos, machacado y requetemachacado, que le habia pasado una apisonadora varias veces por encima, vaya! que no iba a ser capaz de enamorarme, que habia cerrado esa puerta y habia tirado la llave... no se si me entiende. - La entiendo, la entiendo. Pero esto solo pasa una vez en la vida, y es posible, en cualquier tipo de corazon... + De que se trata doctor? - Amor verdadero. Es el unico capaz de reconstruir un corazon roto. + pero.. doctor.. - No tenga miedo, es bonito... dejese abrazar por el calor que le ofrecen. No se arrepentira.